Seguro que, en más de una ocasión, cuando te has dispuesto a pintar, te ha surgido la pregunta ¿con qué pinto, con brocha o con rodillo? Lo primero que debes saber es que uno no es mejor que otro, cada uno tiene sus características y sus funcionalidades y su uso depende de distintos factores, como el tipo de la pared, el estado de la misma, tu práctica al pintar, el acabado deseado…

Pintar con rodillo

Aunque no lo creas, no todos los rodillos ni brochas son iguales y saber diferenciarlos también puede ayudarte a elegir. Hay rodillos para superficies lisas, rugosas, con sistema antigoteo, de poliamida, para esmaltar… Desde Pinturas Macy, te recomendamos que si la superficie a pintar es exterior y/o rugosa, optes por un rodillo para relieves, ya que tienen un mayor rendimiento.

Pintar con rodillo proporciona un acabado más uniforme. Se utiliza para superficies grandes y es una opción más rápida y cómoda. También suele emplearse mucho para las primeras manos de pintura.

Pintar con brocha

La brocha, al ser más pequeña que el rodillo, ofrece una mayor precisión. Pintar con brocha es una opción perfecta en caso de espacios pequeños o de difícil acceso. Te aconsejamos que utilices la brocha para dar las últimas manos de pintura y para repasar los espacios que hayan podido quedar sin pintar con el rodillo.

Como ocurre con los rodillos, las brochas también son de diferentes tipos. Las brochas planas o paletinas, que las encontrarás de distintos tamaños, están indicadas para superficies lisas; y las redondas, para pintar zonas de difícil acceso, como marcos, molduras, pequeños rincones…

Antes de pintar, prepara todos los materiales que vayas a utilizar y cuando termines, recuerda limpiarlos bien para que se conserven en perfectas condiciones. Si no sabes cómo, sigue nuestros consejos para limpiar después de pintar.